¿Cómo ser mejores consumidores responsables?
Para empezar debemos preguntarnos porque deberíamos ser consumidores responsables; ¿Cómo nos beneficiamos al ser consumidores responsables?, ¿Con que fin?, y más importante aún, ¿el consumo convencional no es responsable?
¿el consumo convencional no es responsable?
El consumo responsable es algo nuevo, un nuevo concepto de consumo que surgió como consecuencia antagónica a los modelos de producción y comercialización de las economías industrializadas, las cuales no consideraban los impactos ambientales como consecuencia de las actividades industriales para la producción de bienes y servicios. En las primeras revoluciones industriales (primera y segunda), los impactos ambientales no eran considerados como algo significativo, ni meritorio de importancia. No era relevante considerar si los productos que se comerciaban, se vendían o se producían eran productos elaborados y comerciados mediante un esquema de responsabilidad; por lo tanto, el consumo convencional no era responsable, ya que no contemplaba la responsabilidad socio ambiental en su modelo de negocio. La economía o comercio convencional y por consecuencia el consumo convencional no contemplaba más variables además del precio, costos de producción, calidad del producto, oferta y demanda.
Desarrollo del concepto del Consumo Responsable
Fue hasta las décadas de las décadas de los 70’s y 80´s cuando los intelectuales y académicos de entonces obtuvieron consciencia de que los recursos naturales del planeta no eran infinitos, por el contrario los recursos del planeta eran limitados y algunos recursos no eran renovables; y se llegó a un consenso aceptado por prácticamente todo el mundo de que la Tierra tenía límites físicos y biológicos. Lo anterior representaba un barrera real a la Teoría Económica del crecimiento ilimitado, la cual asumía que el crecimiento económico puede continuar indefinidamente mediante mejoras en la tecnología, el aumento de la productividad y la innovación.
Los recursos naturales son finitos, y el crecimiento económico perpetuo no es sostenible a largo plazo ya que a medida que la economía crece se ejerce una mayor presión sobre los recursos naturales y éstos no pueden regenerarse a la misma velocidad en que son explotados. En un planeta con recursos limitados, y en contraste, un modelo económico que busca crecer de manera ilimitada es la combinación perfecta para el desastre económico, ambiental y hasta social, citando a Muse, “In an isolated System, entropy can only increase”. Es simplemente insostenible.
Otros eventos y movimientos ambientalistas también motivaron la aparición del término de Consumo Responsable, algunos de éstos eventos fueron: La observación de las consecuencias de la contaminación de las fábricas al medio ambiente; El uso de sustancias químicas y bioquímicas potencialmente nocivas (a la salud y el ambiente) en la fabricación de productos de uso cotidiano, y la baja o nula regulación a las compañías que hacían ésto; Un ejemplo de contaminación ambiental por parte de una empresa fue el caso de la empresa Dupont, la cual fue responsable de la liberación de ácido perfluorooctanoico (PFOA), químico empleado en la producción del Teflón, contaminando cuerpos de agua cercanos a su planta en Parkersburg, West Virginia. Por otro lado, la gran cantidad de residuos generados por las fábricas desde la producción de los bienes, el embalaje e igualmente los residuos generados en los productos finales después de su uso, debido al corto tiempo de uso para el que son diseñados.
El “Comercio justo” es otro factor importante que se toma en cuenta cuando se habla de Consumo Responsable, que es básicamente encontrar maneras de que los pequeños comerciantes y productores locales puedan competir en condiciones similares a las grandes empresas y conglomerados industriales.
Bajo éstas premisas comenzó a tomar fuerza el concepto de CONSUMO RESPONSABLE, así que se puede decir que tiene varias aristas, o piezas que lo sustentan.
Así que el Consumo Responsable es la evolución del Consumo Tradicional, ya que contempla muchas más cosas cómo límites biofísicos y ambientales y factores que a su vez buscan el bienestar y prosperidad de la sociedad actual y futura.
Respondiendo a la pregunta, ¿Cómo nos beneficiamos al ser Consumidores Responsables?
Nos beneficiamos de manera indirecta, con la esperanza (o certeza) de que en el futuro nuestros actos o hábitos de consumo responsable nos impactarán positivamente; bajo el supuesto de que si a alguien de tu comunidad cercana le va bien económicamente hablando, como consecuencia tú te beneficiarás directamente en el algún momento. El momento en que el beneficio regrese a tí puede ser en el corto o en el largo plazo, pero es inevitable que te beneficies o que alguien de tú comunidad se beneficie económica o ambientalmente.
Una forma fácil de verlo es simplemente entender que lo que beneficia a unos en el presente beneficiará a otros en el futuro.
Es una forma de altruismo mutuo, pero sustentado en factores medibles, principalmente en tema ambiental, de recursos materiales y económicos.
El fin del Consumo Responsable es contribuir a la comunidad local por medio de acciones y decisiones de compra.
Como consumidores responsables tenemos el poder de influir en la calidad de productos que las empresas ofrecen y en la manera en que fabrican, distribuyen y comercian sus productos.
¿Cómo ser mejores consumidores responsables?
La respuesta rápida es Educándonos e Informándonos
Pasar de ser simples consumidores pasivos y receptivos, que reaccionan a lo que se les pone enfrente, a ser consumidores activos, consumidores informados que deciden por sí mismos.
En el consumo tradicional del siglo XX, las personas estaban acostumbradas a consumir los productos más llamativos que veían en la televisión y otros medios de difusión masiva; por lo general éstos productos aparecían tantas veces en los comerciales que los consumidores terminaban pensando que los productos debían ser buenos sólo porque los pasaban en la televisión, porque eran los productos de moda o porque eran los más llamativos. Sin embargo, pocas personas se preocupaban por saber que había más allá de los productos, por lo general de producción masiva, que les estaban repitiendo infinidad de veces en video-comerciales.
De modo que el consumidor, al no hacerse preguntas sobre los productos que le estaban ofreciendo todo el tiempo, se dejaba influir por lo que los medios decían; Ese consumidor del siglo XX , justo en la época del hiperconsumo, se volvió un consumidor pasivo y completamente influenciado. Pasó algo de tiempo, pero paulatinamente, gracias a la nueva conciencia ambientalista cada vez más difundida, la gente comenzó a cambiar su perspectiva sobre el consumo. De suerte que las últimas generaciones de jóvenes, como los “millennials” o “centennials” tienen más consciencia sobre ésto y han ido promoviendo cada vez más el concepto de Consumo Responsable.
El consumo es una acción de intercambio; de manera simple, es el intercambio de un bien o servicio por dinero. La compra venta de productos, servicios y la transformación de bienes son actividades necesarias para el funcionamiento de la sociedad. Todos somos consumidores o clientes de alguna empresa. Para lo que una persona necesita, hay una empresa que lo fabrica o lo provee. Desde la perspectiva de una empresa, todos somos consumidores (particularmente su mercado objetivo). Independientemente de nuestros intereses, aficiones, estilo de vida y nivel socioeconómico todos participamos como consumidores de alguna empresa. Por lo tanto, la solución a un mejor medio ambiente y sociedad no es dejar de consumir o salirse de la sociedad. La solución es consumir responsablemente.
La solución es ser consumidores responsables, y para ello debemos de educarnos o informarnos constantemente en 4 áreas clave:
- Medio ambiente
- Conceptos básicos de Economía
- Cultura y Sociedad
- Salud preventiva y alimentación saludable
Idealmente, al momento de comprar un producto o compararlo con otro deberíamos de evaluarlo en éstas áreas. Cómo impacta éste producto al medio ambiente, en el tema socio cultural, como impacta a mi economía principalmente, luego si éste producto impacta a la economía local, y uno de los puntos más importantes, que tan saludable es éste producto.
A continuación una breve explicación de las materias en que los consumidores deberíamos informarnos y educarnos para ser mejores consumidores responsables:
- Medio Ambiente: Como consumidores responsables debemos entender la importancia de los ecosistemas naturales, de los elementos que integran los ecosistemas (de sus elementos bióticos como animales y plantas, y de sus elementos abióticos como ríos, suelo, etc.), de los servicios naturales que brindan los ecosistemas (regulación del clima, calidad del aire), y de todo lo que compone el Medio Ambiente. Como consumidores responsables debemos entender que los ecosistemas naturales son sistemas frágiles que tardan tiempo en recuperarse, que la mayoría de veces no son renovables y que debemos no sólo no alterar su estado natural, sino procurar que mantengan su equilibrio mediante la protección de éstos sistemas. Para ésto debemos de conocer qué es lo que les afecta, qué tipo de impactos ambientales existen y de que manera les afecta. Debemos de entender al menos de manera general como nuestras acciones individuales y más aún las acciones de una empresa puedan llegar a impactar a los ecosistemas naturales y al Medio Ambiente y en base a ésto tomar decisiones informadas como consumidores. Todo ésto con el fin de que al momento de comprar un producto nos detengamos a evaluar qué productos tienen menor impacto ambiental contemplando variables como el potencial de contaminación del producto, las emisiones de CO2 equivalentes empleadas en la fabricación del mismo, si se puede reciclar, reutilizar ó si se puede reintegrar a un ciclo productivo (economía circular) y de ésta manera realizar una compra responsable y ser mejores consumidores responsables a la larga.
- Conceptos básicos de Economía: Como consumidores responsables debemos entender conceptos básicos de Economía para entender cómo se relaciona la oferta y la demanda con los precios de los productos y cómo las decisiones de los consumidores pueden impactar a los mercados y al comercio y la economía local. Un consumidor responsable debe entender que el intercambio de bienes y servicios, el comercio y el libre mercado son la base del crecimiento y desarrollo de cualquier comunidad, ciudad, región, país. Un tema clave que un consumidor responsable debe tener presente siempre es la importancia que tienen los productores locales; éstos productores locales pueden ser fábricas regionales, nacionales o productores artesanales. La importancia de éstos productores radica en la prosperidad que generan de manera regional, en forma de fuentes de trabajo y de movimiento de las economías regionales. Los conceptos de comercio responsable, consumo local van de la mano con conceptos como comercio justo, economía solidaria, entre otros. Entender algunos conceptos básicos de economía, así como de la importancia de los productos y productores locales nos convierte en mejores consumidores responsables, ya que en tema económico, como consumidores responsables nuestras decisiones de compra deberían estar influidas no sólo por el precio del producto, también por lo que hay detrás de los productos además de la calidad, como por ejemplo la mano de obra, y el orígen de los productos.
- Cultura y Sociedad: El consumidor responsable, es un ser humano y todo ser humano es intrínsecamente social y los seres humanos o conjunto de seres humanos generan cultura. La sociedad y la cultura van de la mano; todo lo que dejan detrás los seres humanos es cultura, ya que ésta se expresa en cada aspecto de la forma de vida de las personas que viven dentro de una sociedad. Siguiendo ésta lógica, todos los seres humanos que nacemos dentro de una sociedad tenemos una cultura propia en la cual crecemos y de la cual aprendemos a ver el mundo de una manera única. Reconocer la importancia de la cultura es importante para ser mejor consumidor responsable, ya que el consumo no responsable no le da la importancia que merece a las tradiciones y a los productos locales o autóctonos, no le da valor que merece a la mano de obra y procesos tradicionales. En el consumo no responsable históricamente se premia más la cantidad y la velocidad de producción sobre la calidad o los procesos. Es importante entender como consumidor responsable que los productos autóctonos y servicios turísticos regionales además de tener un valor económico, suelen tener un valor cultural y en ocasiones valores inmateriales como pueden ser algunos lugares sagrados. Es importante entender que los bienes culturales pueden formar parte del sustento económico de algunas regiones, y que en caso de erosionarse esos bienes culturales o naturales, podría verse afectado directamente el sustento de comunidades enteras. Por lo tanto, un consumidor responsable debería tener conocimientos generales sobre cultura, pero más importante, que sea capaz de extrapolar a otras culturas ajenas, el respeto y veneración que le tiene a su propia cultura. Por lo tanto, un consumidor responsable debe ser una persona abierta y respetuosa a otras culturas, ideas, preferencias y creencias. Otro rubro importante en relación al tema socio-cultural es el de justicia laboral y condiciones justas de trabajo.
- Salud preventiva y alimentación saludable: En éste punto, es dónde las decisiones del Consumidor Responable le benefician directamente, ya que si bien éste consumidor consciente piensa en el Medio Ambiente, en la Economía local y en la Sociedad al momento de hacer sus compras, nunca deja de ver por su bienestar personal; Por el contrario, a diferencia del consumidor convencional, el Consumidor Responsable al ser un consumidor informado hace mejores compras, ya que sus compras están basadas en datos nutricionales y evidencia científica sobre los ingredientes que llevan los alimentos, sobretodo sospecha sobre los alimentos altamente procesados. Por lo tanto, el Consumidor Responsable está determinado a comprar los productos que le brinden mayor nutrición y que vayan acorde con un estilo de vida saludable. Es importante que el consumidor responsable tenga conocimientos básicos sobre salud, principalmente sobre salud preventiva y conceptos básicos de nutrición con tal de que sea capaz de elegir la mejor opción para su salud.
En Resumen,
Éste concepto de consumo podría considerarse como la evolución del consumo convencional, ya que contempla más variables que afectan a la sociedad, al planeta y al individuo. El Consumidor Responsable ideal exige a los fabricantes, proveedores, distribuidores y comerciantes que los productos o servicios que ofrecen contemplen técnicas y medios favorables con el medio ambiente, con la sociedad, que los productos procuren la salud de sus consumidores y que a su vez generan riqueza de manera local y no usan modelos de negocio extractivos en sus cadenas de valor.
Y éstos son los consejos que damos para ser Mejores Consumidores Responsables, y así con nuestra acción de compra contribuir a un mundo mejor.
Educándonos en temas de Medio Ambiente, Conceptos básicos de Economía, entender un poco más ó estar abiertos a aprender más sobre nuestra cultura y otras culturas y aprender constantemente sobre salud preventiva y conceptos básicos de nutrición.
Nuestras recomendaciones finales para ser Mejor Consumidor Responsable son:
- Educarse en los temas mencionados
- Consumir productos que tengan etiquetas o certificaciones sustentables o en su defecto consumir productos locales o nacionales.
- Seguirnos en todas nuestras redes sociales para mantenerte informado sobre las últimas tendencias y recomendaciones de productos responsables
Algunas etiquetas de Productos Sostenibles:
- De protección al Medio Ambiente:
- Energy Star: Certifica productos energéticamente eficientes*
- Rainforest Alliance Certified: Promueve prácticas agrícolas y de manejo de recursos forestales que protegen los bosques y el hábitat natural
- De manejo Sostenible de Recursos:
- Forest Stewardship Council (FSC): Certifica productos de madera y derivados que provienen de bosques gestionados de manera responsable, promoviendo la conservación de la biodiversidad y el uso adecuado de los recursos naturales.
- Cradle to Cradle: Una certificación que evalúa productos en múltiples atributos como calidad de los materiales, energía renovable, reutilización de materiales, ciclo de vida de los productos, bajo impacto ambiental, entre otros.
- En temas buenas prácticas en temas sociales
- Fair Trade Certified: Asegura condiciones laborales seguras, sostenibilidad económica y fondos de desarrollo comunitario.
- B Corporation (B Corp): Ésta certificación mide el impacto social y ambiental de las empresas, considerando aspectos como el trato a los empleados y las prácticas éticas empresariales.
- En temas salud y sostenibilidad
- USDA Organic: Certifica alimentos y productos agricolas cultivados sin pesticidas sintéticos y con prácticas ecológicas, validado por el departamento de agricultura de EE.UU.
- Global Organic Textile Standards (GOTS): Se enfoca en producir textiles, garantizando prácticas orgánicas y el respeto a estándares sociales en toda la cadena de suministro.