Desconectar es conectar con uno mismo
Sí, leiste bien,
Desconectar es en realidad conectar con uno mismo
Desconectar es un viaje de introspección
La introspección por sí misma un viaje interminable con destino desconocido y aparentemente errante, no obstante, cada paraje dentro del camino de introspección te enseña algo nuevo que complementa tú búsqueda de sentido y te acerca cada vez más al destino anhelado, ese destino que no sabes que buscas, pero que todos buscamos de manera inconsciente, y sin importar que ruta sigamos dentro del camino introspectivo, como dice el proverbio “todos los camino conducen a Roma”, el destino final es conocerte a ti mismo de manera plena.
El autoconocimiento total es ese destino, el encuentro con tu centro, con tu esencia, el punto de encuentro contigo mismo, con tu auténtico ser, tu estado imperturbable, y en última instancia, el estado trascendental más elevado, el Nirvana; éste destino y ese punto de realización se alcanza por medio de la introspección. El puerto final es el autoconocimiento total, que te lleva a la realización existencial por medio del camino sinuoso de la introspección, teniendo como faro a la desconexión.
La Desconexión nos ayuda en el camino introspectivo hacia el autoconocimiento, y eventualmente hacia la realización existencial y el reencuentro con tu centro, con tu esencia.
Desconectar es un faro que alumbra el camino hacia el autoconocimiento verdadero, la desconexión nos alumbra dentro de la espesa niebla de la ilusión del conocimiento propio.
Entonces, Desconectar es en realidad conectar con uno mismo porque desconectar es el mejor punto de partida para alcanzar el autoconocimiento, porque en parte desconectar es desaprender. Desconectar es desaprender principalmente todo aquello que nos impide crecer y desarrollarnos como seres humanos plenos. Cuando hablamos de desaprender estamos hablando de juicios y creencias negativas que asimilamos como nuestras en algún punto de nuestra vida, desaprender todos aquellos atributos negativos que hemos asociado a nuestra personalidad, también desprender hábitos negativos que nos impiden explotar nuestro potencial y alcanzar nuestras metas.
Desaprender también todos los juicios que tenemos sobre las demás personas, desaprender todos esos discursos negativos que nos impiden convivir con el otro, independientemente de creencias y formas de ver la vida. Desconectar es un camino hacia el desarrollo del entendimiento mutuo y la empatía hacia cualquier individuo o ser vivo.
Desconectar es aprender a desaprender, es quitarte esa máscara prejuiciosa que tú mismo te has construido, capa sobre capa, siguiendo lo que los discursos negativos, genéricos, nihilistas de la sociedad te dicen que es lo correcto. Desconectar es conectar con uno mismo porque es como hacer una dieta detox, una dieta para desintoxicarse de toda la mugre y paja mental que te has venido creyendo, una desintoxicación de todo eso que te mantiene nihilista y desesperanzado.
Desconecta de todo ese bullicio de la sociedad, noticias negativas, de todos esos prejuicios y discursos negativos de la sociedad actual y desconecta para encontrarte.
>>Todo el mundo tiene la capacidad de ser introspectivos y de desconectar; no obstante hay que practicar la introspección en sus diferentes niveles y practicar la habilidad para desconectar de cualquier circunstancia, para poder regresar a nuestro centro imperturbable y conectar con nuestra verdadera esencia fuera de todo prejuicio y creencias aprendidas.